La huerta de la escuela convocó a una gran jornada de siembra para recibir a la primavera
Con una gran siembra en la huerta de la escuela, los chicos de la Primaria 60 de La Plata decidieron ganarle al mal clima y las lluvias anunciadas para mañana, y tener hoy su festejo del Día de la Primavera.
Un enorme cartel con la frase Chau Invierno recibió a los 120 alumnos que tiene la institución, de primero a sexto año, pero hoy no ingresaron solos a clase. Para la jornada estaba prevista la participación de las familias que con la mejor predisposición aceptaron ayudar a sembrar a sus hijos.
Es que la huerta de la Primaria 60 ya tiene cierto prestigio entre los vecinos del Barrio platense de Ringuelet. Impulsada este año por Graciela Tillería, la directora de la institución, la huerta se transformó en el proyecto pedagógico más importante de la escuela.
Las etapas planificadas desde principio de año sobre la preparación de la tierra en los tiempos que establece el calendario de plantación, resultó un éxito, y permitió el 25 de junio -en el Día Nacional del Árbol- realizar la primera gran siembra.
Con la segunda jornada de hoy, la huerta se volvió a llenar de plantines de tomates, que ya saben estarán dando sus frutos en dos meses; apio y pimientos, que estarán disponibles en aproximadamente 90 días; verdeo, la más lenta en crecer y lechugas de dos variedades: repollada y mantecosa que en 50 días ya estará abasteciendo el comedor de la escuela.
«Fue muy lindo haber compartido una jornada con las familias e invitar a los papás para hacer algo diferente que no sea por cuestiones de un boletín o por un tema de comportamiento en clase», señaló Graciela Tillería. «Uno a veces no tiene tiempo de llamarlos para algo absolutamente placentero».
Para romper la timidez inicial de las familias al entrar a la escuela, las autoridades les mostraron un video de la primera jornada de siembra del mes de junio. De esta manera tuvieron información sobre la importancia que tiene para sus hijos la huerta escolar.
«La idea sirvió además para que a continuación pasaran al sector de siembra con una actitud diferente, dispuestos a ensuciarse un poco para trabajar la tierra».
Muchos de ellos ya saben que sus niños disfrutan de ensaladas preparadas con las verduras e hierbas frescas de la huerta. Hasta las docentes en varias oportunidades aprovechan algunas especies aromáticas para mejorar el sabor de sus mates.
«Compartimos un lindo momento y los papás se llevaron también plantines y semillas a sus casas para poder seguir el trabajo con los nenes en sus hogares», dijo la directora.
