“Todavía queda un remanente de gente de la gestión anterior que debe seguir siendo investigada”
Idelmar Seillant, titular de SUPTTIOMA y secretario general de APIOMA, comunicó que Chacabuco es una de las localidades en la que, durante los últimos años, se registraron denuncias por corrupción por parte de la obra social IOMA.
“ Los afiliados no tenían un lugar para denunciar porque estuvimos ocho años con gente inescrupulosa”, apuntó.
Y agregó que, por parte del radicalismo y de Cambiemos; “hemos trabajado durante mucho tiempo por fuera de IOMA porque no podíamos hacerlo desde adentro”. En cambio, ahora, con la nueva gestión esto salió a la luz en pos de la transparencia institucional.
Informó que entre el 2009 y el 2010 comenzaron las denuncias de afiliados que ponían al descubierto una serie de irregularidades, las que confirmaron que se trataba de asociaciones ilícitas y de estafa reiteradas que operaban a través de personas fallecidas mediante el tratamiento oncológico con drogas onerosas.
“El avance de la investigación en la provincia, arrojó la existencia de testaferros o personas interpuestas que crean falsas empresas, las cuales generan las prestaciones de IOMA. El 90 por ciento de las internaciones domiciliarias, no se cumplen. Estas empresas invierten mínimamente en internación y cuidado cobrándose módulos onerosos. Médicos, auditorios y representantes de IOMA, mediante internación domiciliaria, se encuentran acusados por corrupción”.
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