La autopsia confirmó que a Facundo Scalzo lo mataron por la espalda

El arma que aportaron los gendarmes como la que supuestamente utilizó el chico baleado no fue disparada. Dos de los tres gendarmes salieron con fianza.

La autopsia realizada al cuerpo de Facundo Scalzo determinó que el joven de 20 años fue asesinado de cuatro balazos disparados por detrás: «Dos impactaron en sus brazos y los otros directamente en la espalda»

Así, la autopsia confirma los testimonios de los vecinos del Barrio Rivadavia II, quienes negaban la versión del «tiroteo» dada por los tres gendarmes detenidos y aseguraban que Scalzo fue perseguido y baleado por detrás. En este sentido, tanto Ávila como Yamila Cirigliano, coordinadora del Área Interdisciplinaria de la Dirección Nacional de Acceso a la Justicia, dieron detalles a este diario de nuevas pruebas aportadas a la causa que confirman que la víctima no portaba armas al momento de recibir los disparos. 

Desde el pasado miércoles por la tarde, momento del asesinato de Scalzo, hasta este martes, todas las versiones brindadas por los testigos del hecho indicaban que el joven había sido perseguido por los gendarmes Juan Pablo Ruiz, Jorge Luis Pérez y Diego Arturo Rocha, para luego ser baleado por detrás. Incluso la médica del Hospital Piñero que recibió a la víctima confirmó a Scalenghe que su hijo había muerto tras recibir disparos en la espalda. Ahora, según informaron a este diario Ávila y Cirigliano, esta versión fue confirmada por la autopsia, que determinó que el cuerpo de Scalzo recibió cuatro balazos, dos en la espalda y otros dos en sus brazos.

Este lunes por la noche, los gendarmes Ruiz y Pérez pagaron la fianza fijada en cien mil pesos por la jueza Alejandra Mercedes Allaud y podrán continuar el proceso en libertad. Por su parte, Rocha, señalado como quien disparó el arma que asesinó a Scalzo, seguirá en prisión preventiva imputado por «homicidio calificado», ya que la jueza entendió que en su caso “se avizora la existencia de un muy alto peligro de fuga y de entorpecimiento de la investigación». 

Sin embargo, todavía no está confirmado que solo Rocha haya efectuado disparos. Las versiones de los vecinos indican que durante el hecho se escucharon más de cuatro detonaciones y que los gendarmes incluso dispararon al aire para ahuyentar a los testigos. Para este miércoles está previsto que se den a conocer los resultados de los peritajes balísticos y de los dermotest realizados en los dedos de los tres gendarmes. Allí se podrá saber si las balas que asesinaron al joven fueron disparadas solo por el arma de Rocha y si en los dedos de los otros dos acusados se encontraron residuos de disparos.

Pero no solo a los gendarmes se les realizó el dermotest. Al cuerpo de Scalzo, que fue acusado por los efectivos de iniciar un supuesto tiroteo que terminó en su muerte, también se le tomaron muestras de sus dedos para saber si efectuó algún disparo. En este sentido, Ávila y Cirigliano confirmaron a este diario que se aportó a la causa un video donde se observa con claridad que en ningún momento de la tarde el joven asesinado tuvo un arma en su poder.

Por otro lado, en el lugar de los hechos los gendarmes secuestraron un arma que adjudicaron a Scalzo. Después de afirmar que el joven era narcotraficante, lo que se descartó de inmediato ya que la víctima no tenía antecedente alguno, dijeron que se trataba del arma con que había iniciado el tiroteo. Ahora, además de los testimonios de los vecinos que indican que ni él ni el amigo con el que intentó escapar de los disparos tenían armas, Ávila y Cirigliano informaron que el arma secuestrada nunca fue disparada. Restará saber entonces de dónde salió el arma con que los gendarmes intentaron inculpar a Facundo.