El presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa denunció la gravísima situación financiera que fue descubierta en la empresa Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) en la nueva gestión a cargo de Malena Galmarini. Massa denunció que, entre otras severas irregularidades, la empresa le pagaba más de tres millones de pesos anuales a la gestión macrista del club Boca Juniors para invitar periodistas a la cancha.
El tigrense denunció que una parte importante del tarifazo aplicado por la empresa de servicios terminaba en las arcas de Boca: “Una empresa como AYSA, que tendría que dedicarse a poner caños de agua y a dar un buen servicio de cloacas, le pagaba 3,2 millones de pesos a Boca para invitar a periodistas a la cancha”.
AySA brinda servicios de provisión de agua potable y cloacas a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y a más de 20 partidos del conurbano bonaerense. El presidente de la entidad durante el macrismo fue el empresario José Luis Inglese. AySA dependía de la Secretaría de Obras Públicas de Daniel Chaín, en la órbita del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda de Rogelio Frigerio. Durante su gestión diversos municipios denunciaron atrasos en obras, promesas de extensión de redes incumplidas y problemas con los servicios.
Al respecto, Massa añadió: “No fueron los grandes CEOs que hicieron grandes gestiones, porque Aysa para este año tiene proyectado por la mala gestión de Macri 14.000 millones de pesos de déficit. Y hay que decirlo con todas las letras: mientras el directorio tenía tarjeta corporativa”. Unos días atrás, el presidente Alberto Fernández había denunciado que la gestión de Galmarini al frente del organismo también había descubierto que la empresa le había pagado indemnizaciones a funcionarios que dejaban sus cargos el 10 de diciembre.
Los polémicos vínculos entre distintas empresas y el club de fútbol seguramente sumarán nuevos capítulos con el fin de la gestión macrista en Boca Juniors. El nuevo presidente Jorge Amor Ameal, que terminó con un ciclo de 24 años de gestiones del propio Mauricio Macri y luego de Daniel Angelici, encargó una auditoría a la Universidad de Buenos Aires, reconociendo que el club “tiene un problema económico real”.
Fuente: informepolitico.com.ar