Macri mezcló a San Martín con el «Sí se puede»

«¿Qué creen que pensaba San Martín al cruzar la Cordillera de los Andes? ¿No, no se puede? o ¿Sí, sí se puede?», lanzó el mandatario al celebrar la primera semana de las marchas que organizó su equipo de campaña. Sobre las elecciones de octubre, aseguró: «La damos vuelta».

Luego de pronunciarse nuevamente a favor del aborto clandestino, el presidente Mauricio Macri llevará la marcha del «Sí, se puede» a Tucumán, donde busca reforzar el voto duro de derecha. Además de manifestarse a favor de «las dos vidas», en los últimos días encabezó un homenaje a víctimas de la guerrilla y reflotó el proyecto para bajar la edad de imputabilidad, sin contar el operativo que lanzó su ministra Patricia Bullrich para pedir el DNI en los trenes. En ese marco, Macri volvió a lanzar un hilo de tuits en el que dijo que, con las marchas, «fue una de las semanas más emocionantes de mi vida» y llegó a compararlas con el cruce de los Andes de José de San Martín. Su adversario electoral, Alberto Fernández, le recordó sus diferencias con el Libertador y le indicó que no hizo «nada heróico».

Macri comenzó en la Ciudad de Buenos Aires, estuvo en la provincia de Buenos Aires (sobre todo, en el interior, aunque también tuvo su breve paso por el conurbano), por Córdoba, Mendoza, Santa Fe y Entre Ríos. Ahora seguirá por Tucumán y luego tiene previsto llegar a Salta. Su objetivo es recuperar votos en grandes centros urbanos de las provincias. Para la próxima marcha, en Tucumán, Macri grabó un video en el que dice: «Queridos tucumanos, quiero invitar a todos los que quieran expresarse en paz, por un futuro mejor para nuestros hijos y nuestros nietos. Los espero el lunes, a las 19 horas, en la plaza Independencia». Llegará luego de haber manifestado nuevamente que se opone a la legalización del aborto: «Claramente, a favor de las dos vidas, a favor de las dos vidas».

En un hilo de tuits, titulado «El poder del sí», el Presidente hizo un balance de la primera semana de marchas y promesas y dejó algunas comparaciones históricas que le merecieron burlas en las redes. «Esta fue una de las semanas más emocionantes de mi vida. Desde el sábado 28 cuando comenzó La Marcha, cientos de miles de personas en distintas ciudades nos acompañaron para expresar públicamente su confianza. Cada vez serán más. Es muy conmovedor», comenzó Macri, con la idea de Jaime Durán Barba de comunicar emociones más que argumentos. «De alguna manera estamos todos conectados por las mismas emociones que nos llevan hacia adelante. La Marcha va más allá de una movilización por una contienda electoral», aseguró.

Y comenzó una transición entre el discurso de campaña y otro más vinculado a la autoayuda que suele aparecer en la narrativa PRO cada tanto: «Es cierto, marchamos para ganar y la participación es decisiva para alcanzarlo. Pero además marchamos para decirnos a nosotros mismos que podemos superar cualquier dificultad y alcanzar cualquier objetivo: `Si, se puede’ es una oración sencilla y poderosa. La historia del mundo está hecha por gente que dijo: ‘Sí, se puede’; ‘Sí, podemos’; ‘Sí, puedo'», adoctrinó Macri, usando el eslogan que hace tiempo tomaron de la campaña de Barack Obama sin mucho disimulo.

«Los países que admiramos se levantaron de tragedias y sufrimientos de dimensiones apocalípticas diciéndose a sí mismos ‘Sí, podemos’. Nuestros héroes y heroínas, en cualquier momento de la historia, fueron personas que, llenas de incertidumbre, avanzaron diciéndose a sí mismas ‘Sí, se puede’. ¿Qué creen que pensaba San Martín al cruzar la Cordillera de los Andes? ¿No, no se puede? o ¿Sí, sí se puede?», comparó su activida proselitista con la campaña por la independencia del colonialismo de América Latina. Esto le valió una serie de bromas en Twitter, donde no dejaron de recordarle su frase dirigida al rey de España en la que habló de la «angustia» que sintieron al independizarse de ese país los próceres argentinos.

Luego Macri siguió con ejemplos sacados de la autoayuda: «Es lo que hacen las personas convalecientes durante una rehabilitación que con dolor vuelve a hacerlos caminar. Es lo que hace aquel que se queda estudiando más allá del sueño. Es lo que hace cualquier chico que juega a la pelota contra la pared soñando con jugar alguna vez la final de la Champions (todos los que juegan esa final fueron alguna vez ese chico). Es lo que hace la pareja que busca un hijo en su tratamiento de fertilidad. Es lo que hace aquel que supera una pena personal inigualable al salir a la calle para continuar su vida a pesar de todo; y lo que hacemos juntos, ahora mismo», enumeró pasando por los más disímiles ejemplos.

«Si el mundo se dividiera en dos equipos, uno el ‘Sí se puede’ y el otro el ‘No, no se puede'», sacó a jugar las metáforas futboleras. «Millones de argentinos y yo estaríamos del lado del ´Sí’. Porque lo contrario es un mundo sombrío y amargo, donde triunfaría la resignación. Y ahí no hay vida, ni esperanza, ni futuro», aseguró Macri, quien concluyó con un «la vamos a dar vuelta».