Un ensayo del acuerdo económico y social

El candidato presidencial celebró el encuentro que anticipa el acuerdo que plantea poner en marcha para los primeros seis meses de su gobierno, en caso de ganar.

Desde Tucumán

La hiperactividad desarrollada por Alberto Fernández, pergeñada por el gobernador de Tucumán, Juan Manzur, se convirtió en el relanzamiento de la campaña electoral del Frente de Todos que incluyó el respaldo explícito a la fórmula presidencial de la CGT y de gobernadores, legisladores y candidatos peronistas. Pero el encuentro en Tucumán tiene además como objetivo el sentar las bases para un gran acuerdo económico social. En esta oportunidad con la participación de dirigentes de la UIA y otros empresarios nacionales más la central sindical. La intención es generar acuerdos con objetivos a corto y mediano plazo para reactivar la economía, generar puestos de trabajo y, sobre todo, enfrentar el flagelo de la deuda que deja la administración macrista. El proceso que se inició en esta provincia continuará con la convocatoria a otras centrales obreras, los movimientos sociales y otros sectores de la industria y la producción. “Tucumán es el escenario donde dimos el primer paso donde estamos los que producen, los que trabajan y los que conducen el Estado”, aseguró Fernández. 

Lo que iba a ser un acto por el 50º aniversario de la UIA se transformó en el espacio para comenzar a desarrollar un gran acuerdo económico social que deberá expresarse en caso de que Alberto Fernández triunfe en los comicios de octubre. “Es un método lo que estamos aplicando”, aseguró uno de los hombres de confianza del candidato del FdT a modo de anticipo de lo que planifican y que ayer fue el primer paso. Ese método implicará la reunión con otras centrales sindicales como las CTA y también con otros sectores del empresariado. «Hoy con Héctor (Daer) y Miguel (Acevedo) hemos comenzado a diseñar el futuro», sostuvo anoche Fernández. 

Fueron cinco discursos y una conferencia de prensa que el candidato presidencial durante la extenuante jornada. En los tres primeros, realizados en una escuela, un acto con maestros y en el almuerzo con la dirigencia política y sindical de las provincias del norte, tuvieron un perfil más de acto de tribuna. El que Fernández realizó en la Casa de Gobierno ante sindicalistas y empresarios fue más de un presidente que esboza su plan de gobierno y convoca a estos sectores a trabajar en conjunto. Será por eso que cuando el titular de la UIA, Miguel Acevedo, comenzó su discurso le dijo presidente y rápidamente se retractó entre las risas de los presentes.

Fernández planteó su compromiso a desarrollar un federalismo real para que “dejar de ser un país desigual donde el que produce en la cordillera no tenga el mismo trato impositivo que el que produce a diez minutos del puerto. Debemos federalizar la Argentina donde dios atienda en todos lados y no sólo en Buenos Aires”. A partir de allí, Fernández prometió que va a acercar el poder central a las provincias y por eso insistió que su gobierno incluirá a los 24 gobernadores.

“Prometo que voy a conducir el timón del país para que logremos que la industria sea el tema central porque esto no lo hace un presidente sino todo un conjunto social”, aseguró el candidato presidencial del Frente de Todos para luego afirmar que “si queremos reconstruir la industria argentina y cómo estamos muy mal nos vamos a tener que poner de acuerdo entre todos”. Luego dijo que había estado reunido con Acevedo y que le había agradado descubrir que “hablamos el mismo idioma”. Poco antes, el titular de la UIA había mencionado ese encuentro y resaltó la decisión de Fernández de apoyar a la industria que “el actual gobierno abandonó”. Incluso reconoció como positivo que se busquen acuerdos económicos sociales aunque aclaró que aunque lo parezca, Fernández todavía es candidato.

Pero Manzur le dio el trato de un presidente a Fernández. Lo recibió con el saludo formal de la guardia de la Casa de Gobierno y en todos sus discursos aseguró que no hay nada que le impida llegar a la presidencia y hasta lo definió como el único conductor del peronismo. Así lo refrendaron gobernadora de Catamarca, Lucía Corpacci, el vicegobernador de Santiago del Estero Emilio Neder, el candidato a gobernador de Salta, Sergio “Oso” Leavy, el gobernador electo de Misiones, Oscar Herrera Ahuad, y Sergio Massa. Acuña de la CGT incluso anunció la decisión de los gremios de ayudar y dar tiempo a Fernández para poner en marcha la economía del país.

El equipo de Fernández se sorprendió por la apretada agenda que organizó Manzur pero también por la capacidad de convocatoria del tucumano que incluyó a la primera plana de la CGT con Héctor Daer (Sanidad), Carlos Acuña (Garages), Gerardo Martínez (Uocra), Roberto Fernández (UTA), Antonio Caló (UOM), Rodolfo Daer (Alimentación), entre otros. Además de Acevedo, de la UIA también estuvieron los titulares de las filiales Tucumán, Salta, Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja, Chaco y Jujuy. El que llegó para la cena final fue el banquero Jorge Brito.