Luego de conocerse la visita de la Gobernadora Maria Eugenia Vidal al Hospital Evita Pueblo de Berazategui, El intendente Juan Patrico Mussi la criticó duramente a través de un comunicado difundido en las redes sociales. Mussi criticó la falta de comunicación que Vidal sostiene con el municipio y la instó a que respete al pueblo berazateguenze.
Durante la mañana de este martes, María Eugenia Vidal estuvo por espacio de casi una hora visitando las instalaciones del Hospital Evita Pueblo, acompañada de la Ministra de Salud bonaerense Zulma Ortiz y del Director del establecimiento, el doctor Rodrigo Castañeda. La gobernadora visitó las obras de neonatología y maternidad que se llevan a cabo y se interiorizó acerca de las necesidades que presenta el nosocomio.
Si bien muchos sectores celebraron esta decisión, el intendente Juan Patricio Mussi se mostró muy molesto a través de las redes sociales con la actitud de la mandataria por considerar que ” a más de 1 año de la gestión de Vidal como Gobernadora, no exista aún una comunicación genuina” con el municipio.
En el comunicado, Mussi también le pide a la gobernadora que “respete la voluntad del Pueblo de Berazategui” que lo eligió como intendente y que colabore para tener “una sana convivencia democrática”.
A continuación el comunicado completo de Mussi:
“Hoy, la Gobernadora Vidal hizo una visita sorpresa al Hospital Evita Pueblo, una buena metodología con la que yo también recorro Berazategui. Pero lo que me llama la atención, es que a más de 1 año de la gestión de Vidal como Gobernadora de la Provincia no exista aún una comunicación genuina con Berazategui, cosa que no contribuye con el diálogo que tanto predicaron desde su espacio y que colaboraría a tener una sana convivencia democrática, y a que pueda conocer los problemas de los bonaerenses que viven en Berazategui. Así como yo respeto la voluntad del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires que la eligió como Gobernadora, le pediría que respete la voluntad del Pueblo de Berazategui que me eligió como Intendente”.
Fuente: El Progreso