Encontraron US$ 20.000 en el baúl del auto del yerno del empresario asesinado

La Policía halló el dinero en una bolsa con cierre hermético en el baúl del auto de Santiago Corona, detenido junto a otro sospechoso por el crimen de Roberto Fernández

 

Los investigadores del crimen del empresario Roberto Fernández Montes, asesinado el sábado en el barrio porteño de Caballito, encontraron en el baúl del auto de su yerno, detenido por el caso, 20.000 dólares que se creen son los que la víctima ocultaba en el motor del jacuzzi de su casa y fueron robados por los asesinos, informaron hoy fuentes policiales.

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Se trata de dos fajos de 10.000 dólares cada uno que detectives de la comisaría 11ra. de la Policía de la Ciudad encontraron en el baúl del Citröen C4 color champagne del Santiago Corona (34) cuando el acusado quedó preso en esa seccional.

Los dólares estaban adentro de una bolsa plástica negra para cápsulas de café usadas de la marca Nespresso, que estaba en el compartimiento de la goma de auxilio del auto, en el baúl.

Se trata de una bolsa con un cierre hermético que no permite pasar la humedad, por lo que los investigadores creen que con esa misma bolsa Fernández Montes guardaba esos ahorros en el motor del jacuzzi de su baño.

Fuentes de la investigación revelaron a Télam que en el C4 de Corona también se levantaron algunas huellas dactilares que ahora están siendo analizadas para ver a quién pertenecen.

 

Fernández Montes, nacido en España, era viudo y tenía dos hijas: Natalia, la mayor, y Giselle, que vivía con él en Aranguren 36, Caballito. Hace 17 años que había montado “Mini Vial”, una empresa de alquiler de maquinarias de construcción.

Un rosario de plata fue la clave para identificar el cuerpo de Roberto Fernández Montes (67), asesinado en su departamento de Caballito y abandonado en un descampado de Cañuelas. Su familia lo buscaba desde el sábado. Un día después fue detenido su yerno, captado por las cámaras del edificio donde vivía el empresario, guardando el cuerpo en un auto con ayuda de un cómplice. Una estafa y una carpeta con documentación atraviesan una historia que terminó en tragedia.

Fuente: Clarín