Alergia de invierno: Sus molestos síntomas y cómo cuidarnos

aler

La alergia es asociada generalmente a la primavera, pero el sistema respiratorio puede reaccionar ante alérgenos que están presentes durante todo el año, como pólenes, alimentos, metales, medicamentos, ácaros del polvo y hongos.

Las alergias suelen estar presentes en periodos de cambios de estación y más fríos, también denominada por algunos como  “primavera otoñal”, donde los cambios bruscos de temperatura sumados a los agentes mencionados aumentan las alergias.

Estos alérgenos provocan rinitis, que es la inflamación de la mucosa nasal y en algunos casos asma, enfermedades que dejan a las personas muy susceptibles de adquirir infecciones virales o bacterianas.

La doctora Isabel Carranza, otorrinolaringóloga de Clínica Vespucio, explica que los síntomas más frecuentes de estas patologías son la congestión nasal, estornudos, picazón de nariz y ocular. “La tos es el síntoma frecuente y nos hace pensar en un compromiso bronquial, sin embargo es el síntoma principal del asma. La rinitis y asma son enfermedades que muy comúnmente van asociadas, por lo que estos síntomas se pueden sumar y generar muchas molestias en el paciente”, afirma la especialista.

Tanto la rinitis como el asma, se pueden desencadenar en las épocas de cambios de estación o de temperatura, nos explica la doctora: “en el otoño existen otros pólenes en el ambiente y con el frío, más el aumento de la contaminación, se concentran las partículas alergénicas en el ambiente. Vale decir, está comprobado que con la polución las partículas se agrupan, lo que es irritante para la vía aérea”.

Es importante tener en cuenta que los pacientes alérgicos tienen más predisposición a padecer de cuadros infecciosos respiratorios. También quienes tienen antecedentes de familiares directos que sufran de alergia tienen por otro lado mayor tendencia a desarrollar cuadros alérgicos durante su vida.

Tratamiento y prevención

La especialista explica que el tratamiento no es único, ya que depende del cuadro y del grado de compromiso del paciente, al ser una enfermedad compleja que se clasifica en distintos tipos o niveles.

“En términos generales, todos los pacientes reciben antihistamínicos orales, acompañados o no de corticoides, los que funcionan como antiinflamatorios de la vía nasal, oral o ambas dependiendo del grado de compromiso de la vía aérea y severidad de los síntomas. En caso que a este cuadro alérgico respiratorio de rinitis y asma, se sume una infección bacteriana respiratoria, se agregan al tratamiento antes mencionado antibióticos. De ser necesario, se puede complementar con kinesioterapia respiratoria en el caso de los pacientes asmáticos que tienen crisis”, nos explica la doctora Clínica Vespucio.

La especialista explica que la alergia no se puede prevenir como tal ya que es una respuesta propia de cada organismo a factores del ambiente, pero que sí  se pueden tomar algunas medidas para evitar los síntomas de la enfermedades alérgicas respiratorias, estos son: sacar alfombras, no tener mascotas al interior de la casa, ventilar los ambientes y limpiar el polvo, evitar los ambientes hacinados y con aglomeraciones, cuidarse de los cambios bruscos de temperatura y enfriamientos.