¿Por qué suben los precios con el dólar oficial planchado y tarifas sin aumentos?

Los empresarios dicen que es por la «inercia inflacionaria» que viene de la gestión macrista. En el Ministerio de Desarrollo Productivo avanzarán en estudiar la cadena de valor y en reforzar el programa Precios Cuidados.

En el Ministerio de Desarrollo Productivo adelantaron a este diario que comenzarán a trabajar en las cadenas de valor de distintos sectores económicos para entender cuáles son las variables que provocan aumentos de precios. Además, reforzarán el control del programa Precios Cuidados y están trabajando para ampliarlo en mayoristas y supermercados chinos.

Esta es la respuesta a la inquietud del presidente, Alberto Fernández, quien tildó de irresponsables a los empresarios de la industria productora de alimentos que “juegan” con los precios de la canasta básica. Había afirmado que desde el Gobierno van a darle pelea a los precios “de cualquier modo”.

Pese a la estabilidad cambiaria y el congelamiento de naftas y tarifas, las consultoras estiman que la inflación de enero volverá a superar el 3 por ciento.

Precios

“Sorprende que la inflación vuelva a estar en torno al 3 por ciento teniendo en cuenta el calibre de las anclas que se están utilizando: cambiaria y tarifaria”, indicó Juan Ignacio Paolicchi de Eco Go. 

“Con el tipo de cambio planchado y sin correcciones en los precios ni siquiera de las naftas, la inflación debería dar más cerca de 2 que de 3, o inclusive por debajo”, agregó. Desde la consultora registran que el rubro alimentos aumentó por encima del 4 por ciento, en parte por la eliminación del IVA cero para los productos de la canasta básica.

Desde la consultora Elypsis estiman que la inflación de enero será de 3,5 por ciento, con una suba de alimentos y bebidas de 3,3 por ciento. “Los productos que más impulsaron este rubro fueron yerba, harinas y lácteos”, indicó el economista Juan Solá de Elypsis. 

La entidad Consumidores Libres relevó que sólo en los primeros 15 días del mes la canasta básica subió 3 por ciento en la Ciudad, mientras que un año atrás esa suba había sido del 1,9 por ciento. 

El primero de enero llegó el fin del IVA cero en una canasta de alimentos, medida que impulsó el gobierno de Cambiemos para contener, sin éxito, la estampida de precios tras la devaluación de agosto. El actual Ministerio de Desarrollo Productivo acordó con supermercados que no trasladaran el IVA, para evitar subas del 21 por ciento, y en cambio, que absorbieran los aumentos en conjunto con las industrias alimenticias. 

Sin embargo, las partes que no formaron parte de la negociación registraron subas de sus proveedores de más del 21 por ciento. Fuentes de comercios mayoristas y almacenes barriales indicaron que tras el fin del IVA cero el aceite, la harina, la azúcar y la yerba registraron subas por encima del 30 por ciento. “Es imposible absorber esos aumentos porque te fundís a los dos días”, aseguró a este diario Victor Fera, dueño del mayorista Maxiconsumo.