El LarretaAfter

La peculiar campaña del macrismo porteño, que busca votos con una simulación de «after office»

La nueva movida de campaña del jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta es un extraño trailer con música electrónica, bailes y tragos. El camión ya fue estacionado en plaza Devoto, frente al Hospital Zubizarreta, y en la vereda de Junín y Vicente López, frente al Cementerio de Recoleta.

Todos los votantes son iguales. Y como para el PRO algunos son más iguales que otros, diseñaron una campaña on demand. Por eso, el macrismo lanzó para los barrios porteños más exclusivos el “LarretAfter”, una inusual modalidad de campaña a favor del jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta que en plena calle simula un after office con música electrónica, bailes y tragos.

La iniciativa que toma el nombre y la modalidad del after office fue lanzada por la Juventud PRO de la Comuna 2 y consiste en una mini rave con un truck desde donde un DJ crossover mezcla con sintetizadores y secuenciadores un repertorio de música trance, progressive, tech-house, minimal, house o cualquier otro estilo, según la demanda de los dancers.

Dicho en otras palabras, el “LarretAfter” es una reunión que simula las salidas después del horario de oficina, cuyo epicentro es un pequeño tráiler de un camión arriba del cual un chico pasa un repertorio de música electrónica para los potenciales jóvenes votantes de Juntos por el Cambio. Y divertidos vecinos del lugar, obvio.

El trailer no fue instalado en cualquier barrio porteño, claro. La elección de los lugares para la movida es, por lo menos, cuestionable: enfrente de un hospital y de un cementerio. Para ser precisos, la semana pasada el camión fue estacionado en plaza Devoto, frente al Hospital Zubizarreta, y días después en la vereda de Junín y Vicente López, frente a la paz del Cementerio de Recoleta.

El “LarretAfter” es la evolución del stand chato de madera terciada y plástico con panfletos y boletas repartidas a mano. Aquí, la atracción es la música, no el o la militante que explica las propuestas. No hay política ni argumentos. Hay un ambiente festivo con gente divertida salta, baila y regala pins.

Lo cierto es que el espectáculo experimental de campaña que busca atraer el voto joven convocó a por lo menos una o dos decenas de personas que se juntaron brindar, hacer selfies y celebrar la vida con globos luminosos y multicolores, ya no los viejos amarillos de látex. También bailaron house, dance y techno. Según los testimonios, no sonó la cumbia #SiVosQuerés.