a jueza federal de Caleta Oliva Marta Yáñez indicó que la decisión de reflotar o no el submarino ARA San Juan dependerá de un estudio de factibilidad técnica y económica. La magistrada indicó que cuenta con 67 mil fotos tomadas por la empresa Ocean Infinity que permitirán avanzar en la investigación sobre los motivos del hundimiento del submarino. En tanto, el ministro de Defensa, Oscar Aguad, salió a insistir en que el submarino es imposible de reflotar. “No se puede. No debe haber en el mundo tecnología para reflotarlo”, indicó. No obstante, los familiares de los tripulantes recordaron que la empresa que lo encontró dice tener los medios para poder reflotarlo y asegura haber hecho rescates de este tipo en el pasado. De esto, ni Aguad ni la jueza dijeron nada.

La magistrada que tiene a su cargo la causa sobre el hundimiento del ARA San Juan aseguró que “habría que hacer un estudio para ver si es factible desde el punto de vista económico y técnico reflotar el submarino”. Indicó que, antes de eso, se analizarán las 67 mil imágenes tomadas por la empresa que consiguió hallarlo y con eso se hará “una suerte de maqueta que nos permita dar paso a eventuales pericias”. La jueza indicó: “Hoy no conocemos la conveniencia desde el punto de vista procesal” de traer al submarino a la superficie. Y advirtió que “no es lo mismo que lo puedan reflotar dañando las condiciones primigenias en las que quedó, y que nos van a graficar las fotografías. Eso alteraría de por sí la prueba”.

Contrario a lo que había afirmado Aguad, que le cargó a la jueza la responsabilidad de decidir sobre reflotar o no al submarino, la magistrada indicó que si se determina que debe ser reflotado “será resorte y quedará a cargo del Poder Ejecutivo”.

Aguad, no obstante, volvió a la carga. Con la misma liviandad que antes hacía afirmaciones sobre las redes sociales, ahora aseguró con certeza absoluta que “no hay factibilidad técnica de reflotar” el submarino. No solo afirmó que el Estado argentino no tiene las herramientas tecnológicas, sino que dijo que “no debe haberlas en el mundo”. “No es que sea una decisión: no se puede”, vendió Aguad. “Es tanto el dolor de algunos familiares, que todavía están haciendo el duelo, que no se pueden generar estas expectativas. Hay pícaros que dicen estas cosas aún sabiendo que no se puede hacer. No se puede jugar así con el dolor”, le apuntó el ministro de Defensa al kirchnerismo.

Insistió en la dificultad de la tarea que le piden los familiares: “No debe haber en el mundo capacidad técnica como para reflotar una mole de más de dos mil toneladas”, aseguró. Aguad también dijo que el submarino “debe estar en condiciones de mucha fragilidad”. Aunque luego aclaró que no había podido ver todas las evidencias. “Nosotros ahora tenemos que pagar 7,5 millones de dólares y eso, en este momento del país, es toda una cifra. Y sin embargo no hemos puesto ningún reparo en hacerlo porque sabíamos que podíamos encontrar el submarino”, insistió.

Aguad tiene un pequeño problema: sin ir muy lejos en la búsqueda, la empresa que se ocupó de encontrar el submarino dice tener la capacidad técnica para recuperar el submarino. “Los próximos pasos son un asunto que deben determinar las autoridades. Nos complacería ayudarlos en la operación de recuperación, pero en este momento estamos enfocados en completar las imágenes del campo de escombros”, señaló el CEO de la empresa, Oliver Plunkett, a Tiempo Argentino. “Hemos realizado numerosas operaciones de recuperación y estamos bien equipados para ello”, insistió el empresario, contradiciendo al ministro, que buscaba instalar la idea de que no existe posibilidad en el mundo. “Aún no hemos recibido ningún pedido de presupuesto, así que no podemos comentar nada al respecto”, dijo Plunkett cuando le preguntaron cuánto costaría una operación de ese tipo.

Los familiares de los tripulantes no le dejaron pasar este hecho al ministro Aguad. “Nosotros queremos saber la verdad, qué lo refloten y se sepa qué pasó”, dijeron. Varios de ellos recordaron que la empresa les informó que puede hacer rescates de hasta 1500 metros de profundidad (el submarino está a 900 metros). “La empresa que lo encontró dice que tiene las herramientas para sacarlo”, afirmó Luis Niz, padre del cabo homónimo, quien interpretó que el motivo por el que Aguad insiste en no reflotar el submarino es económico: “Desde el Gobierno se fijan más en la plata que van a gastar que en sus soldados y en que puedan volver con sus familias”. “Estoy segura de que van a decir que no se reflotará”, indicó Isabel Polo. “Para mí esto fue un circo armado, se eligió el 16 de noviembre. Yo no creo en las casualidades”, remarcó. “¿De qué contención y de qué ‘cuentan conmigo desde el día uno’ me hablan? Yo no soy estúpida ni pierdo la memoria”, remarcó sobre el discurso del presidente Mauricio Macri. Otra familiar, Yolanda Mendiola, remarcó que reflotar el submarino es una decisión que ahora “depende del Presidente”.