Movilización del 18-12: La Federal se niega a identificar al uniformado que atropelló e hirió a un cartonero


La Policía quiere jugar al Gran Bonete


El juez federal Sergio Torres dictó la falta de mérito y liberó al policía Dante Barisone y denunció por encubrimiento y falso testimonio a los superiores que se desdijeron luego de haberlo identificado como el autor del hecho.
El policía acusado de haber pasado con su moto por encima del cartonero Alejandro “Pipi” Rosado el día de la última movilización contra la reforma previsional fue beneficiado con “falta de mérito” y quedó en libertad por decisión del juez federal Sergio Torres después de una semana detenido. Se trata de Dante Barisone, cuyo nombre había sido entregado por el Ministerio de Seguridad en base a un informe de la Dirección de Asuntos Internos de la Policía Federal tras una intimación del juzgado.
No es que Barisone no tenga nada que ver con el hecho, eso aún está por verse, sino que los policías que en un comienzo lo habían identificado en el informe administrativo como el protagonista de la agresión contra Rosado se desdijeron cuando fueron citados a declarar en la causa como testigos. “Yo no di certezas”, dijo uno de ellos, el comisario Oscar Hipólito, que es el jefe del Grupo de Operaciones Motorizadas de la Federal (GOMF). “Sólo deduje que podía ser él por la contextura física que vi en la filmación que está en youtube”, afirmó el oficial Gabriel Ortega, que estaba a cargo de uno de los grupos de motos que estaba sobre la calle Hipólito Yrigoyen.
Torres no les creyó y los denunció por posible encubrimiento y entorpecimiento de la identificación del personal involucrado. Pero a la vez evaluó que, ante las inconsistencias, se quedó por el momento sin elementos para mantener preso al policía: no se pudo establecer ni siquiera el número de chapa  de su moto y hay dudas sobre si estaba a la vista u oculto. La querella acusa a la cartera de Patricia Bullrich de mentir pero a la vez responsabiliza al juez “por permitir el entorpecimiento”.

Torres decidió dictarle falta de mérito a Barisone, lo que implica que queda en una situación intermedia: ni procesado ni sobreseído. Planteó que no podía quedar detenido por el estado de duda que generaban las declaraciones de los policías. Ayer, además, decidió hacer lo que en la jerga jurídica se llama “extraer testimonios”, que quiere decir hacer una denuncia penal, en este caso contra el comisario Hipólito y el oficial principal Ortega, por posible encubrimiento, lo que incluiría un intento de entorpecimiento y presunto falso testimonio.

Torres le pidió un nuevo informe al Ministerio de Seguridad. Uno de los problemas para saber quiénes son los policías agresores es la ausencia de identificación. Ya sea porque tienen una numeración que no está a la vista o porque tienen, algunos, la patente tapada o camuflada, o no la tienen.  El informe policial decía que Barisone había usado la moto   número 3333, pero el agente dijo que no era esa sino la número 1625. Lo cierto es que, hasta ahora, por las imágenes ese dato no fue corroborado.

Fuente: Página12