El HSBC decidió no abrir el sábado

 

Gabriel Martino, el presidente del HSBC, es el banquero preferido del gobierno de Mauricio Macri. Con acceso fluido a la Quinta de Olivos suele defender las medidas oficiales casi como un vocero del gabinete. Se entiende, el macrismo le levantó todas las sanciones que le impuso el kirchnerismo por lavado y le permitió ocupar nuevamente la dirección del banco.

 

 

 

Por eso, cuando el blanqueo empezó a tambalear, Martino se apresuró a anunciar que este sábado su banco abriría las puertas para permitir que la gente que quiera abrir una cuenta en el último día permitido para blanquear efectivo, pudiera hacerlo.

Pero la presión sindical se hizo sentir y este viernes por la noche el titular de La Bancaria, Sergio Palazzo, anunció que finalmente el HSBC había aceptado permanecer cerrado este sábado.

El conflicto escaló sobre todo a partir de la fuerte resistencia de la seccional rosarina de La Bancaria, que anticipó que ningún trabajador de su organización se presentaría a trabajar el fin de semana.

«El gremio va a garantizar que los bancos no abran», sostuvo en diálogo con LPO Matías Layús, secretario del sindicato, quien agregó que «los compañeros no van a trabajar, los bancos tienen que abrir de lunes a viernes; los sábados y domingo no se trabajan y por lo tanto estamos alerta para que esto no suceda»

Es que desde el HSBC y el ICBC habían pedido autorización al Banco Central para operar durante el fin de semana dado que el lunes es el último día para que aquellos interesados en el blanqueo pudiesen abrir cuentas especiales.

«Vamos a garantizar con todos los medios que estén a nuestro alcance para que no se lleve adelante esta actividad», advirtió Layús quien no descartó que se realicen piquetes si alguna sucursal se dispone a abrir sus puertas.

Sin embargo, según informaron delegados del HSBC, la gerencia aceptó la posición de La Bancaria: «La propuesta -para abrir el fin de semana- llegó de Buenos Aires, la gerencia planteó la situación al cuerpo de delegados que expresó su posición y sin mayores discusiones el banco decidió no abrir», explicó la delegada Alejandra Ongaro.

«La negociación no fue conflictiva, se habló y enseguida dijimos que no. Se elevó a Buenos Aires la resolución y lo aceptaron», confirmó Ongaro, pariente del creador  de la CGT de los  argentinos.

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