Violencia en el noviazgo

Los empujones, tirones de pelo, cachetadas, burlas o insultos son conductas violentas. La repetición de este tipo de comportamientos es la característica de una relación violenta.

De la misma manera, entre los adolescentes es muy frecuente también el maltrato emocional, cuyos indicadores son, en general, amenazas de terminar la relación, acusaciones, descalificaciones y celos excesivos. En estos casos, el problema puede ser más difícil de resolver, porque al no haber golpes físicos, las adolescentes no perciben que están viviendo una relación violenta y muchas identifican esas conductas como indicadores de cariño.
En efecto, muchas mujeres maltratadas durante su proceso de recuperación descubren que era evidente que la violencia en sus parejas había comenzado en el noviazgo.

La violencia previa

Es durante el noviazgo que las jóvenes parejas ya se enfrentan a situaciones traumáticas que poco tienen que ver con el amor o con lo que se espera de una relación que se está iniciando.

Es necesario prevenir situaciones de violencia conyugal, detectar signos de alerta, y revisar la relación en el interior de las familias involucradas.

Una persona no es violenta de la noche a la mañana, existen actitudes que son síntomas. Es indispensable separar el amor de la posesión, donde el factor de los celos abusivos suele ser confundido con un positivo exceso de cariño.

La V es una conducta aprendida, previa a la formación de la pareja y no cambia espontáneamente por la voluntad o las promesas.

Ciclo de violencia

Etapa de acumulación de tensión: se muestran insultos, reproches, escenas de celos, y control, silencios prolongados, burlas, malestar constante y en aumento.

Se agregan incidentes que pueden incluir algunas formas de maltrato físico (no golpes), empujones, apretones de brazo, tirones de cabello, trabas, etc.

Etapa de estallido de violencia: incidentes con todo tipo de agresión física, golpes, rotura de objetos, y amenazas.

Puede tomar características aun más graves, ocasionando lesiones severas y llegar hasta la muerte de cualquiera de los protagonistas.
Etapa de arrepentimiento: se manifiestan expresiones de perdón, promesas de cambio, interés sexual, regalos y tranquilidad.

Comienza con expresiones afectuosas breves, pasando rápidamente al abuso sexual y pudiendo llegar a la violación.

El sistema de relación va construyendo una espiral y el tránsito entre las diferentes etapas es más rápido, modificando el grado de violencia en cada fase.

¿Por qué las adolescentes maltratadas permanecen con sus novios? Lo primero que dicen es que lo quiere, pero luego hablan de su inseguridad, manifiestan sentirse culpable de no ser la mujer esperada por él, y además les tienen miedo. Pero también piensan que nadie les va a creer, pq el novio es bueno con todo el mundo y se echan la culpa pensando que algo habrán hecho para merecer el maltrato.

La respuesta del entorno

En general, se tiende al silencio, y esto se debe a que todavía no hay una conciencia pública de la cadena de crímenes cotidianos donde las mujeres terminan como víctimas de homicidio.

Es fundamental que los adolescentes puedan replantearse sus elecciones y cuenten con personas en quien confiar lo que les pasa para pedir ayuda.

La importancia de la prevención

Es necesario llegar de manera adecuada, y en los lugares donde se encuentran en forma conjunta los adultos y jóvenes, como escuelas, centros culturales, trabajos, clubes.

La conducta violenta afecta familias de todos los niveles económicos y culturales, y a pesar de que lo más importante es el maltrato físico, el maltrato emocional es una forma de abuso que daña, enferma, desgasta y anula a quien lo recibe.

Reconocer la Violencia significa desbaratar los cimientos de una cultura arraigada donde la mujer debe soportar los abusos de su pareja; es por ese motivo que muchas sufren en silencio hasta las consecuencias más fatales. Sin embargo, los tiempos parecen estar cambiando y afortunadamente cada vez más son las personas que se animan a romper el silencio.