El Presidente es seguido por la estela de su padre hasta el otro extremo del mundo. Esta vez sucedió en China, adonde Mauricio Macri llegó para participar de la Cumbre del G-20.
Apenas arribó al país asiático, que es el «principal inversor» de la Argentina, una de las noticias que se viralizó en las redes sociales fue la de una imagen donde se promocionaba el encuentro, que incluía la foto de cada uno de los mandatarios que estarían allí, pero con el rostro de Franco Macri, su padre, luciendo una media sonrisa.
Fuentes del Gobierno argentino aclararon que no se trató de un afiche oficial de la cumbre sino de un error cometido por la agencia oficial de noticias Xinhua. Más allá de las explicaciones del caso, el Presidente debió reponerse rápidamente de la situación, porque iniciaba su agenda en la ciudad de Hangzou con una reunión bilateral con su par local, Xi Jinping.