Escuelas abiertas en verano: Aprender en la escuela y nadar 1200 metros

Escuelas Abiertas en Verano 2 enero

Jóvenes y adultos unieron 1.200 metros en aguas abiertas tras aprender a nadar en la escuela

Pasaron de tenerle miedo al agua a tomar confianza para nadar en aguas abiertas. Lo lograron en apenas casi dos meses en la Escuela Abierta en Verano para Adultos y Adolescentes que funciona en el Centro de Educación Física Nº 165 del distrito de Puan.

Allí, los alumnos de entre 14 y 60 años, que a principios de este año experimentaron por primera vez el contacto con el agua en un natatorio, se animaron ahora a unir a nado abierto los 1200 metros que separan la Laguna zonal de la Isla Municipal, en un singular cierre para las originales y saludables clases estivales.

«La mayoría de quienes participaron no son nadadores de grado ni tienen conocimiento previo del agua sino que aprendieron a nadar en la escuela abierta de verano», resume Diego Maldonado, guardavidas en la institución, quien señala que «esta es la primera experiencia de los alumnos en una pileta municipal de 30 metros y es importante que la hayan podido trasladar a aguas abiertas sin bordes para sostenerse o descansar».

La actividad realizada ayer al mediodía fue el atractivo del lugar, donde los lugareños se agolparon en la orilla para ver la inusual prueba de estos nadadores que, en su recorrido, fueron acompañados por guardavidas, una lancha municipal y gente en canoas, kayaks y tablas para ayudarlos a subir en caso de cansancio. Algunos no completaron el total de los metros pero se animaron a estar en un espacio de aguas abiertas cuando hasta hace poco tenían temor de nadar.

«Es una experiencia muy linda, gente que aprendió a flotar y a nadar en diciembre, realiza ahora un cruce a nado. Quienes nunca en su vida pensaron en nadar terminan uniendo 1200 metros de una orilla a la otra y en aguas abiertas. Es diferente a la pileta porque se producen otras situaciones; por ejemplo, en la laguna la ola es más cortita y depende del clima cómo va a estar el día para cruzar», sostiene Maldonado.

 

Puan es una localidad de 5 mil habitantes ubicada al sudoeste de la Provincia de Buenos Aires, en la última elevación del sistema de Ventania y cuenta con 20 hectáreas de lago y una isla natural. La Escuela Abierta en Verano que funciona en el CEF Nº 165, que cuenta con natatorio y un polideportivo municipal, ofrece un trabajo de campo con juegos, actividades artísticas y educción física. También se desarrolla trabajo de pileta y familiarización con el agua, en diferentes horarios, tanto para chicos de escuela primaria como para quienes están en el plan de Adultos y Adolescentes.

Quienes aquí concurren pueden disfrutar de un ambiente natural como el balneario municipal o la laguna mientras tienen la posibilidad de animarse a nadar en un espacio abierto sin bordes. «El primer sentimiento que tienen es el miedo, hasta que lo van perdiendo y ya después ven que lo pueden hacer. Aprenden a confíar en sí mismos, eso depende también de los profesores y de los guardavías. Tratamos en todo momento de darles confianza, alentarlos, decirles: «vos podés», es fundamental», explicaron la directora de la EAV, Angelina Grecco, y el guardavidas Diego Maldonado.

Ambos sintetizan el resultado del proyecto señalando que «a medida que pasan los meses y toman confianza en que lo pueden hacer, valoran su propio esfuerzo y la satisfacción por los logros obtenidos es mayor. Cuando la persona que no sabe nadar se anima a unir una distancia tan grande disfrutando un espacio con una profundidad de 5 o 6 metros, la sensación es de alegría por creer en sí mismos y perder el miedo al agua».

La Plata, 30 de enero de 2016.