Pipinas: Un taller de cocina donde chicos de entre 3 y 5 años preparan pan casero y galletitas
En Pipinas ,1020 habitantes ,muy cerca de La plata ,con el programa «Escuelas Abiertas en Verano» los chicos de entre 3 y 5 años que concurren allí, al Centro de Integración Comunitaria municipal ,se interesaron por investigar las prácticas de la cocinera que diariamente prepara el almuerzo para todos los que allí concurren.
Así surgió la propuesta de los profesores de un taller de cocina para los pequeños, una actividad distinta donde elaboran pan casero y galletitas.
«La iniciativa está atravesada por un eje pedagógico también, cuenta la docente a cargo, Sofía Clausi, ya que trabajamos con el aprendizaje de las cantidades y lo hacemos por grupo de acuerdo a las edades».
Agrega que «los más chicos, de 3 años, colocan las unidades de harina, sal, agua y huevo en un recipiente, otros revuelven; una vez hecha la masa cortamos y repartimos un pedazo para cada uno y cada cual se encarga de hacer sus panes. Finalmente los colocan en una fuente y la cocinera, Daniela Zangla, la pone al horno».
En los próximos días también cocinarán galletitas en el horno de barro que están preparando los chicos de primaria en la escuela abierta en verano con quienes comparten el predio.
Alumnos y profesores decidieron emprender una actividad distinta a las acostumbradas para aprovechar la naturaleza y el aire puro que les proporciona esta localidad recortada por calles de tierra y extensiones verdes cultivadas, donde trabajan los padres de los chicos.
En Pipinas también se vive del turismo, por lo que sobre la ruta 36 hay muchos puestos artesanales con venta de productos regionales. Queda a 25 kilómetros de Verónica, en el partido de Punta Indio, y desde allí viaja Sofía todos los días para dar las clases que no se agotan en el taller de cocina sino que alterna con actividades artísticas y ecológicas.
Por ejemplo, mediante producciones visuales con pinturas realizadas por los chicos con pinceles armados por ellos con goma o con otros utensilios y aprovechan los materiales de la naturaleza como hojas, ramas y piñas. «Podemos recolectar todo lo que queramos porque contamos con un lugar muy amplio de 4 hectáreas, bien parquizado, con dos piletas y bastante sombra», señala Sofía.
La gran expectativa está puesta ahora en los instrumentos musicales que ellos mismos están preparando en el taller de reciclado. Su objetivo es acompañar a la comparsa especialmente convocada para el cierre del programa. Para eso, construyen tambores con bidones, maracas con potecitos de yogur o vasitos de helados y flautas con botellas de gaseosas de medio litro a las que les hacen agujeritos que van tapando a medida que soplan. Entusiasmados y ansiosos quieren estrenar los instrumentos al compás del baile.
Prensa: Dirección de Educación y Cultura
La Plata ,22 de enero 2016